domingo, 30 de septiembre de 2012

Llambría

Durante mi estancia en Granada tuve la suerte de poder escaparme un día para escalar con mis amigos Yamil y Loreto. Fuimos al Veleta, cuna de la escalada clásica granadina. La vía elegida esta vez fue la Llambría, que ya tenía el ojo echado desde hacía bastante tiempo. 

La subida fue como casi siempre, en el microbús. Cinco euros que te ahorran un par de horas de caminata. En nuestra defensa diré que la subida al Veleta nos tiene especialmente cansados a todos. Una vez en las posiciones sólo hay que bajar hasta el Veredón y andar un momento hasta la pared. 




Ahí nos pusimos los cacharros encima 




y Yamil empezó con el primer largo. 




Luego, claro está, le seguimos Lore y yo. Este primer largo sale sobre IV-IV+, siendo esta la dificultad general de la vía, con algunos pasillos de V-V+ que hay más adelante. Tiene algunos pasillos interesantes en cualquier caso, y no es especialmente difícil de proteger. 




Como ya he dicho, luego nos tocó a Lore y a mi. 




Allí Yamil montó una reunión estupenda. Con un friend y un fisurero.




Y allí nos hicimos una foto para celebrarlo. 




Allí cambiaron las tornas. Yamil me dio el relevo y me dejó abrir el resto de la vía hasta arriba. ¡Mola! Así que me tuve que colgar todos los cencerros, cual vaca lechera y tirar para arriba.  




Como ya he dicho toda la vía es IV-IV+ con algún paso puntual de V. El primero de ellos está protegido por un parabolt pero, para variar, tienes que dar un pequeño salto de fe antes de chapar. Aparte este largo también tiene un pequeño diedro muy divertido de superar. Aquí podéis verme pasándolo (bueno, más bien podéis ver mi culo). 



Y luego al culo de Lore. 


El de Yamil tristemente no está disponible, porque iba el último. 

Esta vez no nos perdimos, como es habitual, pero sí es cierto que no calculé bien la longitud de las cuerdas y no conseguí llegar hasta una de las reuniones. Por suerte había un spit nuevo que pude usar. No es muy recomendable, pero este estaba bastante nuevo, así que decidí usarlo y largarnos cuanto antes. Así que en cuanto llegaron nos largamos. Empezábamos ya a estar cansados, como atestigua esta foto. 



El último largo es bastante sencillo salvo el final. Por eso antes del paso clave decidí montar una nueva reunión y esperar a mis compañeros. Esta sí la monté yo, pero quedó mucho más segura que la del spit. 



Y allí toca la salida. Es un diedro ligeramente desplomado, pero no mucho. Lo más difícil es que no hay casi nada arriba que agarrar, así que la salida se complica. Afortunadamente en el vértice del diedro hay una grieta y allí entran los friends a cañón. Metí dos, pero con uno hubiera bastado porque eso no lo saca ni Hulk. En esta foto se aprecian los dos, uno a la altura de la rodilla y otro en la del pecho. 



De ahí ya es sólo salir, aunque eso es más fácil decirlo que hacerlo. Primero le tiré muy envalentonado. 




Y tuve que dar marcha atrás. Como se ve en la foto sacar el brazo es fácil, lo difícil es que le siga el resto del cuerpo. En mi caso a la segunda fue la vencida. 



Y llegar fue todo un alivio. 




Allí ya monté reunión y me senté a esperar a mis compañeros. Lore fue primera y Yamil después. Así podemos ver como Yamil hizo el paso desde arriba. 




Se puede ver que el problema es que por arriba no hay donde agarrarse y es todo muy romo. 




En cualquier caso se sale. Una vez arriba, ya tranquilos nos hicimos la foto de la cumbre los tres. 





viernes, 10 de agosto de 2012

Sequoya Nationa Park

Para terminar mis aventuras californianas hablaré del Sequoya National Park. Este está bastante cerca de Yosemite, a unas 5 horas por la ruta más corta, aunque nosotros tardamos bastante más porque pasamos por Death Valley. 



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Las normas de acampar, las zonas y los precios son todos iguales que en Yosemite. ¿Qué diferencia hay entonces? Pues básicamente hay dos, primero que hay infinitamente menos gente que en Yosemite. La segunda está clara, las secuoyas, los árboles más grandes (en volumen, no en altura) se encuentran aquí. 

Nada más entrar nos dimos una vuelta con el coche, ya que sólo teníamos un día y encontramos un mirador bastante chulo. 




Desde donde hay unas vistas impresionantes. 






Y como ya dije hay sequoias impresionantes por todos lados. Estos árboles son muy resistentes a los fuegos y suelen crecer indefinidamente, por lo que viven siglos hasta que su propio peso las hace caer, fácilmente pasan de los 80 metros de altura. Dicho tal cual puede no impresionar, pero si suponemos un edificio con pisos de 3 metros es bastante fácil encontrar allí sequoias más alta que un edificio de 10 plantas. Una auténtica pasada. Además están por todos lados, no es que haya tres o cuatro enormes y el resto son árboles normales, las hay grandes y más grandes. Como os podréis imaginar en las fotos no sale realmente reflejado, así que tendréis que ir a verlas.




De hecho son tan grandes las sequoias que una cayó a la carretera y decidieron hacerle un túnel en vez de quitarla (también lo hicieron por darle un toque más pintoresco, claro). En cualquier caso se prestaba a hacerse fotos haciendo el idiota. 




El Árbol más grande en volumen, que no en altura o grosor, se encuentra aquí. Se trata del General Sherman, una sequoia relativamente joven, de 83.3 metros de alto y un grosor en la base de 11 metros. Alrededor suya han hecho una especie de parque donde se pueden ver unas cuantos de los árboles más grandes del mundo. El General Sherman es bastante fácil de localizar. 




Y desde lejos impresiona aún más. 




También hay un árbol que talaron y que se usa para ilustrar la edad de estos individuos. 




Y aquí, cerca del General Sherman tuvimos una visita inesperada. Tanto asustarnos con los osos sin ver ni uno por fin una pareja decidió aparecer y dejarse ver. Como es normal esto no es un zoo, así que no había nada entre los osos y nosotros y siempre mantuvimos una distancia prudencial, unos 10 metros. Por suerte los osos negros no son agresivos. 







Y fue impresionante, ver los osos tan de cerca y en su hábitat natural. Fue el fin perfecto para un viaje genial, si no los hubiéramos visto me habría faltado algo.




Hala, un último consejo, id siempre de viaje con gente enrollada, así sale todo mucho mejor.




viernes, 27 de julio de 2012

Yosemite II. Treking

Después de una parada por vuelta al trabajo sigo contando nuestras peripecias californianas. Como ya dije en la anterior entrada Yosemite es el paraiso no sólo de los escaladores, sino también de los senderistas. Un destino típico es la Yosemite Fall, que se divide en dos cascadas, la inferior y superior (originales estos americanos). En esta foto, tomada desde otra montaña que hay enfrente, se puede apreciar el salto entero. 




Hay una ruta que comienza justo al lado de la zona de acampada y que sube a lo alto. La ruta que hicimos mi amigo Bastian y yo fue, subir a la Upper Yosemite Fall, de allí andar hasta el pico Eagle Peak, que forma parte de los Three Brothers, de ahí se puede ir andando hasta el famoso El Capitan. La ruta está bastante bien marcada, con señales con las millas que te van quedando (no olvidemos que tienen millas y pies allí).




Casi todo el desnivel está acumulado al principio, en subir a la Yosemite Upper Fall. Es un camino bonito, pero extenuante. Hay un desvío más o menos a la mitad, a una hora y media (approx) desde el comienzo, donde te permite ir a la base de la cascada más alta. Para eso hay que salirse del camino y trepar/destrepar un poco, pero es todo bastante sencillo, eso sí hay que ir con cuidado de no resbalarse. Acercarse demasiado a la zona mojada es bastante temerario.




Una vez en la base hay una vista impresionante.




Desde allí hasta la zona alta de la cascada queda aproximadamente otra hora. Una vez allí hay una señal que indica el camino hacia el Eagle Peek o la cascada. En lo alto de la cascada hay una poza, bastante chula. Según nos contaron un mes antes de ir nosotros un iluminado decidió que era divertido bañarse ahí, como es previsible fue succionado por el agua y aterrizó unos 100 metros más abajo. Así que no os acerquéis demasiado (Captain Obvious).




Desde la cumbre hay un pasamanos que lleva a un pequeño mirador, no es especialmente peligroso pero sí que hay que ir con un poco de cuidado.



Desde allí un cartel indica la dirección del Eagle Peak. Ya el desnivel principal está superado, habiendo sólo que subir para llegar al pico en sí. Todo transcurre por lo una pradera (o ellos lo llaman así), donde había miles y miles de mosquitos. La crema repelente es imprescindible si pasáis por aquí. La vegetación se vuelve más interesante, con árboles muy altos (pinaceas). Hasta el Eagle Peak se tarda, aproximadamente, otra hora y media.




Una ve en lo alto del pico hay una vista muy buena de otro pico mítico de la zona, el Half Dome. Ojo, para subir a este hay que pedir permiso unos días antes y puede que no te lo den, como nos pasó a nosotros.



Desde allí hasta El Capitan ya se me hizo un poco pesado, pero al ser el pico más conocido de la zona no quisimos dejarlo escapar. El camino es igual que antes, fácil de identificar, plagado de mosquitos y con árboles. Al final hay una señalización que indica el pico de El Capitán, aunque en este caso el punto más alto es difícil de determinar, por eso la foto de la victoria nos la hicimos en un pequeño vivac que había allí.



Aquí las vistas son un poco peores, al no haber un sitio con altura máxima claro. Además los alrededores están llenos de árbol y acercarse a la pared no es una opción. Esto último tenerlo bien claro, la pared es totalmente vertical y si te acercas demasiado es bastante fácil caer por ahí, más de 100 metros de caída no deben ser agradables.

Una vez en El Capitán hay dos opciones, volverse por donde se llegó que es lo que hicimos nosotros, o seguir el camino en dirección Oeste. La segunda opción tiene lo bueno de no repetir el camino, pero no te deja en el mismo punto de inicio, obviamente, luego hay que andar unas 4 millas por la carretera para volver. Nosotros hubiéramos preferido tomar por ahí, pero si no apalabras con alguien el que te recoja es un poco arriesgado, sobre todo teniendo en cuenta que yo llegué al camping reventado.

Como ya he dicho anteriormente la zona de las praderas tiene una vegetación interesante.



Así como la fauna.




Finalmente otro dato interesante. Nos cruzamos con varios grupos que hacían algo similar a lo nuestro, pero acampando. Si se pide un permiso se puede acampar y hacer una ruta de varios días sin problemas. Eso aumente la emoción de encontrarse con un oso, sin duda. XD

viernes, 6 de julio de 2012

Yosemite I


 La primera parada importante de nuestro viaje californiano fue el parque nacional de Yosemite. Sobre este escribiré dos posts, este con información general del parque y el segundo donde hablaré de los trekkings que nos hicimos. 



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Situación e información general

Este se encuentra a unas 4 horas de Berkeley en coche. El mejor camino que encontramos era ir dirección Este, hacia un pueblo llamado Manteca, desde allí ya empezaron los carteles a Yosemite y fue muy fácil llegar. El parque es enorme, como os podéis imaginar, y hay bastante información en su página web. Por entrar con el coche hay que pagar 20$ y puedes estar una semana, para más tiempo hay otras tarifas que vienen en la web. 

A la hora de buscar alojamiento hay básicamente 3 opciones. Primero, hay sitios al borde del parque con hoteles y campings, cuestan algo caro y están bastante cerca de la frontera, pero media hora echas cada día en entrar y salir. Segundo, si eres muy aventurero puedes solicitar un permiso para acampar dentro del parque, o acampar sin permiso antes de entrar. Eso es lo que hicimos nosotros el primer día y fue bastante divertido, sobre todo por el miedo a que un oso nos asaltara el coche. Finalmente, dentro del parque, en el Yosemite Valley, hay varias zonas de acampada que cuestan 5 dólares por persona y noche, no tienen ducha y el baño está asqueroso, pero estás en mitad del monte y es barato. Esta es la opción que tomamos nosotros, salvo el primer día, y me parece sin duda la mejor.

Aquí un mapa del Yosemite Valley, que es donde se encuentra casi toda la civilización. En el Yosemite  Village hay una piscina, duchas, conexión a internet, tiendas y restaurantes. El resto, es todo salvaje, XD.

Para moverse por el valle se puede ir en coche o coger el bus, que es gratis. 




Acampada

Como ya he dicho esta es la opción que tomamos para alojarnos, salvo la primera noche que dormimos más al raso. Lo primero que encontramos en la zona de acampada fue una ranger muy simpática que nos dio una lección muy extensa sobre como evitar que los osos te destrocen el coche. 




Las normas son bastante sencillas. 

- No dejar nada que huela en el coche. Nada de comida, bebida, pañales, cremas, medicinas o lo que sea. Los osos pasan todas las noches por la zona de parking y rompen alguno que otro para sacar lo que haya dentro. 

- Todos estos enseres anteriores tampoco se pueden dejar en la tienda, si no quieres tener un susto. Para guardarlos cada grupo tiene una caja de hierro donde hay que dejarlo todo, basura incluida. 

- Hay que tener cuidado al conducir, sobre todo de noche. Nos dijeron que unos 15 osos son atropellados al año en el parque, lo que nos da una estimación del número de osos totales: muchos. 




También había un cartel con normas para seguir si al final te encuentras con un oso. No lo fotografié, pero venía a ser algo así. 

- Sobre todo no correr, total si el oso corre más que tú. 

- Defender la comida, no dejar que la coja si lo puedes evitar porque los osos que se acostumbran a la comida humana se vuelven violentos (francamente no se si me la jugaría por educar a un oso=. 

- Lanzarle objetos pequeños, ojo, no muy fuerte para no herirlos (jajaja). 

- Por último, si consigue la comida no intentes recuperarla (captain obvious). 

También hay otra fauna más escasa y difícil de ver, pero que da algo más de respeto. Al menos eso decían los carteles. 



La zona de acampada, como ya he dicho, tiene unos servicios bastante mejorables y no tiene duchas. Para ducharte puedes ir a Yosemite Valley, como ya he dicho antes. 

Por último mencionar que se puede hacer fuego en la zona de acampada. Hay unos anillos (fire rings) preparados cada cuatro tiendas donde hacerlo. También venden madera allí mismo y piden que no se traiga madera de otros sitios ni se recoja por ahí. Eso sí, hay que apagarlo con agua al terminar, no vaya a salir todo ardiendo.

El entorno

Como os podéis imaginar el entorno es genial. De ir de acampada lo mejor es interactuar con la gente de otras tiendas. Como es de esperar hay muchos escaladores y senderistas y después de la faena están bastante dispuestos a compartir información y experiencias. 

La organización del parque la llevan los Rangers (no los PowerRangers ni Chuck Norris, rangers normales), como es habitual por ahí. Lo mismo espantan a los osos, que te venden un mapa o te ponen una multa. 

Por otra parte hay gente como para aburrir. Nosotros fuimos en Junio y conseguimos sitio para acampar de milagro. Se estima que cada año visitan Yosemite unos 3 millones de personas, así que en Julio y Agosto tiene que ser una feria aquello. Si se van en esas fechas es muy recomendable reservar el alojamiento con algo de antelación. 



To be continued...

domingo, 1 de julio de 2012

San Francisco

Como ya sabréis recientemente he visitado California y aquí empiezan mis peripecias al respecto. 

La ciudad más importante que visitamos fue San Francisco ya que el congreso al que vimos estaba en Berkeley, a una media hora. 


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Vamos a dar unos datos sobre la conectividad. San Francisco (SF) tiene un aeropuerto bastante grande, pero no hay demasiados vuelos internacionales. Nosotros volamos a Atlanta y de allí a SF. El aeropuerto se conecta con la ciudad por medio de un tren/metro, el BART. Con este puedes ir también a Berkeley en una media hora. El precio es variable en función de la distancia, basta con mirar en la estación de entrada cuanto vale el destino y pagar con tarjeta o efectivo. También hay autobuses, pero tienen la particularidad de que no devuelven cambio.

La ciudad en si es una ciudad de contrastes. Se mezclan edificios enormes, de grandes corporaciones, con mucha pobreza e indigentes. 






También hay mucha música callejera y de media es bastante buena.


Hay muchas cosas que visitar, pero si se tiene poco tiempo como nosotros es recomendable empezar por la zona de Markt Street, donde empieza el puente Oakland Bay Bridge. Allí suele haber puestos de ropa y bisutería y demás y se reconoce desde lejos por el reloj.




Desde allí ya se puede empezar a andar siguiendo el paseo marítimo, por la calle El Embarcadero. Después de una pequeña caminata se llega a uno de los sitios más emblemáticos de la ciudad, Fisherman's Wharf. Aquí hay un millón de tiendas de todo tipo y sitios de comida.



Al final de la zona de tiendas hay un mirador desde donde se ve la isla más famosa del lugar, Alcatraz, bastante bien. Como se ve en la foto tampoco parece tan lejana, imagino que la seguridad correría a cargo de los tiburones de la zona. Si se quiere visitar la cárcel hay que reservar con unos días de antelación y cuesta un mínimo de 22$, aquí la web.




Siguiendo el paseo marítimo se llega hasta la zona de La Marina, donde hay bastantes parques que los franciscanos aprovechan para jugar al frisby o lanzarse pelotas de Rugby (que típicos son, por el FSM).
Después se encuentra la pequeñísima playa del centro de la ciudad.




Y a partir de ahí ya se empieza a ver el famoso Golden Gate. Este se puede cruzar andando o en bicicleta, pero lleva un rato.



A partir de ahí ya se puede comenzar la vuelta. En caso de no querer andar de nuevo la misma ruta siempre se puede coger un bus, que los hay por toda la zona. Si pasáis la noche allí también es una ciudad genial para ir de marcha, hay pubs donde tomarte una cerveza o cenar que están bastante bien y son "muy americanos".



Otras cosas curiosas sobre SF. Es una ciudad donde la comunidad gay es bastante fuerte, en un estado  que no es especialmente progresista. Cuando yo estuve ya se estaban preparando para la fiesta del Orgullo y había banderas multicolor por todos lados.



Hay infinidad de músicos y artistas callejeros, además de puestos donde comprar bisutería o ropa hippy.


Y eso es todo, sin duda una ciudad bastante interesante y que merece la pena visitar. Si se queda uno más tiempo sigue habiendo cosas que hacer y visitar, como Chinatown o hacer un curso de surf, como hizo mi amigo Bastian.